jueves, 2 de abril de 2009

Volveran las oscuras golondrinas.Gustavo Adolfo Bécquer


Originario de Sevilla, España, Bécquer nació el 17 de febrero de
1836 siendo su padre José Domínguez Becquer un célebre pintor del costumbrismo sevillano
quien dejó huérfano a Adolfo a los cinco años; comenzó sus primeros
estudios en el colegio de San Antonio Abad, para luego pasar a tomar
la carrera náutica en el colegio de San Telmo.
A los nueve años quedó huérfano también de su madre Sra. Joaquina Bastida de Bargas y salió del anterior
colegio para ser acogido por su madrina de bautismo. A la edad de
diecisiete años dejó a su madrina para viajar a Madrid.
No era fácil subsistir de la literatura y
Bécquer que deseaba encontrar fortuna lo que
abundó fueron escaseces, por lo que se vio obligado a servir de
escribiente en la Dirección de Bienes Nacionales.
Tiempo después encontró una plaza en la redacción de
"El Contemporáneo" y fue entonces que escribió la mayoría de sus
leyendas y las "Cartas desde mi celda".
En 1862 llegó a vivir con Bécquer su hermano Valeriano, célebre en
Sevilla por su producción pictórica pero no por eso más afortunado
que Gustavo, y juntos vivieron al día uno traduciendo novelas o
escribiendo artículos.Mucho les costó a los hermanos salir
adelante de su infortunio y con el tiempo lograron juntos
una modesta estabilidad que les permitía a uno retratar por obsequio
y al otro escribir una oda por entusiasmo.
Como legado para la literatura del mundo, Gustavo Adolfo Bécquer
dejó sus "Rimas" a través de las cuales deja ver lo melancólico y
atormentado de su vida; en el género de las leyendas escribió la
célebre "Maese Pérez el Organista", "Los ojos verdes", "Las hojas
secas" y "La rosa de pasión" entre varias otras. Escribió esbozos
y ensayos como "La mujer de piedra", "La noche de difuntos", "Un
Drama" y "El aderezo de esmeraldas" entre una variedad similar a
la de sus leyendas.
En septiembre de 1870 dejó de existir Valeriano, duro golpe para
Gustavo, que pronto enfermó sin ningún síntoma preciso,luego de pulmonía
que se convirtió luego en hepatitis para tornarse en una pericarditis
que pronto había terminar su vida el 22 de diciembre de ese mismo año.


Volverán las oscuras golondrinas,
en tu balcón sus nidos a colgar
y otra vez con el ala en tus cristales,
jugando llamaràn.
Pero aquellas que el vuelo refrenaban
tu hermosura y mi dicha al contemplar,
aquellas que aprendieron nuestros nombres,
¡Esas no volverán!

Volverán las tupidas madreselvas
de tu jardín las tapias a escalar,
y otra vez a la tarde, aún más hermosas,
sus flores se abrirán.
Pero aquellas cuajadas de rocío
cuyas gotas mirábamos temblar
y caer, como lágrimas del día.
¡Esas no volverán!

Volverán del amor en tus oídos
las palabras ardientes a sonar,
tu corazón, de su profundo sueño
tal vez, tal vez despertará.
Pero mudo, absorto y de rodillas
como se adora a Dios ante su altar,
como yo te he querido
¡desengáñate!, así ¡no te querrán!
---------------

Los invisibles átomos del aire
en derredor palpitan y se inflaman,
el cielo se deshace en rayos de oro,
la tierra ¡se estremece alborozada!

Oigo flotando en olas de armonías
rumor de besos y batir de alas,
mis párpados se cierran,
¿qué sucede?, ¡es el amor que pasa!
---------------

Alguna vez la encuentro por el mundo
y pasa y se sonríe,
y yo me pregunto ¿cómo puede reir?
Luego asoma a mis labios
una sonrisa,máscara del dolor,
y yo digo ¿acaso ella ríe, como me río yo?
----------------

Hoy el cielo y la tierra me sonríen
hoy llega al fondo de mi alma el sol.
Hoy al he visto,la he visto y me ha mirado,
¡Hoy creo en Dios!
----------------

No digáis que, agotado su tesoro,
de asuntos falta, enmudeció la lira;
podrá no haber poetas; pero siempre
habrá poesía.

Mientras las ondas de la luz al beso
palpiten encendidas,
mientras el sol las desgarradas nubes
de fuego y oro vista,
mientras el aire en su regazo lleve
perfumes y armonías,
mientras haya en el mundo primavera,
¡habrá poesía!

Mientras la ciencia a descubrir no alcance
las fuentes de la vida,
y en el mar o en el cielo haya un abismo
que al cálculo resista,
mientras la humanidad siempre avanzando
no sepa a dó camina,
mientras haya un misterio para el hombre,
¡habrá poesía!

Mientras se sienta que se ríe el alma,
sin que los labios rían;
mientras se llore, sin que el llanto acuda
a nublar la pupila;
mientras el corazón y la cabeza
batallando prosigan,
mientras haya esperanzas y recuerdos,
¡habrá poesía!

Mientras haya unos ojos que reflejen
los ojos que los miran,
mientras responda el labio suspirando
al labio que suspira,
mientras sentirse puedan en un beso
dos almas confundidas,
mientras exista una mujer hermosa,
¡habrá poesía!
----------------------

Cuando veo el azul horizonte perderse a lo lejos
Al través de una gasa de polvo, dorado e inquieto,
Me parece posible arrancarme del mísero suelo
Y flotar con la niebla dorada, en átomos leves,
Cual ella deshecho.
Cuando veo en la noche en el fondo oscuro del cielo
Las estrellas temblar como ardientes pupilas de fuego,
Me parece posible a do brillan subir en un vuelo
Y anegarme en su luz y con ellas, en lumbre encendida
Fundirme en un beso.
En el mar de la duda en que bogo, ni aun sé lo que creo,
Sin embargo estas ansias me dicen,
Que yo llevo algo, divino aquí dentro.
-----------------------------

Podrá nublarse el sol eternamente;
Podrá secarse en un instante el mar;
Podrá romperse el eje de la tierra
Como un débil cristal.
¡todo sucederá! Podrá la muerte
Cubrirme con su fúnebre crespón;
Pero jamás en mí podrá apagarse
La llama de tu amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario